Durante los meses de octubre y noviembre, la generación de tercer año de la Escuela de Psicología de la Universidad Finis Terrae, guiada por los profesores de Psicología Educacional II, Bernardita Vial y Raimundo Bernstein, diseñaron y aplicaron talleres de habilidades socioemocionales en tres colegios de la Región Metropolitana, a cursos desde segundo básico hasta primero medio.

Como una forma de acercarse tempranamente los futuros entornos profesionales, se desarrolló la estrategia curricular de Vinculación con el Medio que consistió en diseñar, implementar y evaluar un taller psicoeducativo, en torno a temas que se ha detectado que son de gran importancia para la convivencia de los colegios: empatía, asertividad, resolución de conflictos, liderazgo positivo, manejo del estrés y cyberbullying.

La docente Bernardita Vial notó que “los estudiantes están altamente motivados por hacer algo que se aplica realmente y se mostraron muy comprometidos y preocupados por los alumnos que participaron en su taller. Involucrarse emocionalmente genera aprendizajes más profundos y significativos. Al mismo tiempo, se han dado cuenta lo difícil que es ser profesor y han empatizado con este actor de la comunidad educativa que a veces se descuida”.

Estas instancias se realizaron en los colegios Santa Marta (perteneciente a la Red Educacional Santo Tomás de Aquino), Pedro de Valdivia de Providencia y en el Municipal de Las Condes. Cada taller consistía en dos sesiones, que se aplicaron en semanas sucesivas y, según indicó Bernardita Vial, “lo distintivo de un taller, en contraste con una charla, es el uso de actividades participativas y juegos, recursos que fueron altamente valorados por los alumnos como medio de trabajo, por el nivel de conexión e involucramiento que generan”.

Para los estudiantes la experiencia fue “fructífera”, tal como comentó Daniela Acuña, quien agregó que vivió una aproximación “real de lo que se tiene que realizar. El mayor desafío fue llevar la teoría a la práctica. Me sentí con ansias, pero también segura ya que la experiencia sería útil para mi formación“. Por su parte, Miguel Jiménez expresó que “fue muy interesante poder ir a terreno y ver cómo trabaja un psicólogo educacional en un colegio. En el futuro, podría haber una reunión previa con el profesor del curso, para comprender qué tipo de dinámicas son más provechosas con esos niños en particular, y prevenir posibles dificultades en el manejo del curso”.

Renata Meza afirmó que “fue muy bueno hacer algo práctico, en un curso real y en un colegio real. Recibimos un buen feedback de los alumnos del primero medio al que le realizamos el taller y eso nos dejó muy contentos. Nos habría gustado aprender más técnicas para el manejo de grupos grandes, ya que fue como ser profesora y era un desafío captar la atención, y evitar que conversaran para no interrumpir”.

Raimundo Bernstein, docente a cargo del ramo, mencionó como proyecciones futuras, generar un trabajo más de largo aliento, incluyendo la observación de aula previa a la implementación de los talleres y la retroalimentación a profesores en temas de convivencia escolar.