Con el fin de modernizar la base de datos jurisprudencial de la Corte Suprema y aumentar la eficiencia en la búsqueda de sus sentencias, el máximo tribunal de nuestro país inició en agosto de 2020 un proceso de categorización y sistematización de sus fallos, con el objetivo de crear un buscador que mediante el uso de inteligencia artificial analizará y clasificará las sentencias de dicho tribunal. Un proyecto que busca así facilitar la labor jurisdiccional y el acceso a la doctrina jurisprudencial —es decir, el razonamiento de los ministros que llevó a una decisión en particular— de todos los actores del sistema judicial.

El proyecto fue desarrollado a través del Centro Documental de la Corte Suprema en conjunto con la Corporación Administrativa del Poder Judicial, los abogados investigadores de la Dirección de Estudios y la colaboración de 1.900 estudiantes y académicos de 19 universidades de todo el país, quienes tuvieron a su cargo la recopilación y clasificación de los fallos estudiados.

Como parte de este trabajo colaborativo, las alumnas de cuarto y quinto año de la Facultad de Derecho de la Universidad Finis Terrae, Tamara Huichal, Josefa Jélvez, Debora Aguilera y Susana Rivas, junto a los licenciados de nuestra facultad María Constanza Cubillos y Nicolás Romero, analizaron 340 sentencias del máximo tribunal en materia de filiación, adopción, amparos y violencia intrafamiliar, bajo la guía de la directora de la Escuela de Derecho, Ángela Arenas. Un trabajo cuyo nivel de excelencia fue especialmente reconocido por la Corte Suprema, en una íntima ceremonia realizada en el Palacio de Tribunales.

En la instancia, la exministra de la Corte Suprema y coordinadora del proyecto, María Eugenia Sandoval, destacó la labor realizada por el grupo de pasantes de la facultad, señalando que “el aporte realizado por la Universidad Finis Terrae resultó muy valioso y relevante. El equipo liderado por la profesora Ángela Arenas ha contribuido al estudio de un número importante de sentencias de derecho de familia, que conformarán esta base de datos que tiene como objetivo primordial su uso público, para que toda la ciudadanía pueda tener acceso al conocimiento de estos fallos”.

Una vez finalizada la ceremonia de reconocimiento, la directora de la Escuela de Derecho de la Universidad Finis Terrae, Ángela Arenas, señaló que “este trabajo es una tremenda oportunidad para que los estudiantes puedan aproximarse a jurisprudencia de tribunales superiores de justicia y una valiosa oportunidad pedagógica que se nos da a los profesores, ya que implica realizar un trabajo intenso y con un alto nivel de exigencia junto a los alumnos. Culminar este proceso en un salón como este, que es donde ellos van a jurar el día de mañana como abogados, es muy emocionante y significativo”, concluyó.

“La experiencia de hacer esta pasantía en la Corte Suprema ha sido bastante gratificante y enriquecedora para mi formación como futura abogada. Insto a que los estudiantes de derecho postulen a estas pasantías y puedan aprender mucho más. Es una experiencia que me permitió conocer el criterio que utilizan los ministros para fallar, algo que si bien uno puede estudiar en la cátedra universitaria, es distinto el analizar cada paso que dieron los ministros para llegar a dictar una sentencia en un caso concreto”, señaló sobre la experiencia, la alumna de quinto año, Debora Aguilera.

Por su parte, la alumna de cuarto año Tamara Huichal señaló que “fue una instancia que me permitió crecer enormemente al ver ya la realidad de la carrera, los problemas que se suscitan en el día a día y cómo la Corte Suprema los soluciona. Para mi formación como futura abogada esta experiencia me sirvió bastante, es una base para saber a qué me voy a enfrentar al salir de la universidad. Invito a todos a participar en estas instancias, la facultad nos brinda oportunidades únicas como esta que hay que aprovechar”, concluyó.

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