Creadas en 2005 por las universidades pontificias de Chile y Argentina, con el fin de responder al llamado del entonces cardenal Joseph Ratzinger (actualmente S.S. Benedicto XVI) para revitalizar la discusión sobre los grandes problemas morales a la luz de los principios del orden natural, la decimosexta versión de las Jornadas Internacionales de Derecho Natural se realizó este año en la U. San Ignacio de Loyola (Perú), reuniendo a veinte expositores, entre académicos de universidades de Chile, Argentina, Perú, Brasil, España y Bolivia, y miembros de la Corte Superior de Justicia del país anfitrión.

Esta nueva versión del encuentro académico, patrocinado por la Asociación Internacional de Ius Naturalistas, giró en torno al análisis de cómo el desarrollo y la implementación de la inteligencia artificial pueden afectar la dignidad inherente de las personas en áreas como la privacidad, la autonomía, la administración de justicia y la toma de decisiones, con el fin de explorar cómo el derecho natural puede proporcionar un marco ético para abordar estos desafíos y proteger la dignidad humana frente a las tecnologías emergentes.

En las jornadas, la Facultad de Derecho de la Universidad Finis Terrae fue representada con tres ponencias: Privacidad, Inteligencia artificial y dignidad robótica del decano, Ignacio Covarrubias Cuevas, La dignidad humana frente a los desafíos de la inteligencia artificial, trabajo desarrollado por el director de la Escuela de Derecho, Marco Antonio Navarro Galaz, y Socialización natural y polarización política en la era de los algoritmos computacionales, ponencia del profesor de nuestra Facultad, Alberto Díaz Rivero.

“Queremos que la Facultad forme parte de la Asociación Internacional de Ius Naturalistas para seguir participando en estas Jornadas Internacionales de Derecho Natural, que el próximo año se van a realizar en la Pontificia Universidad Católica Argentina, en Buenos Aires, y para el 2026 pretendemos proponer a nuestra Universidad como sede de las jornadas”, señaló el director de la Escuela de Derecho, Marco Antonio Navarro.