La Comisión de Venecia participó en una reunión con decanos de diez facultades de Derecho nacionales, con el fin de conocer las opiniones del mundo académico sobre el proceso constitucional que vive el país.

El encuentro se realizó en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile y fue parte de un conjunto de reuniones que dicho órgano consultivo del Consejo de Europa tuvo durante su visita a Chile. Todo ello en el marco de la consulta formulada a dicho organismo internacional —del cual nuestro país forma parte desde 2005— por el Senado de la República de Chile.

Participaron de la instancia los decanos Pablo Ruiz-Tagle (U. de Chile), José Ignacio Martínez (U. de los Andes); Isabel Aninat (U. Adolfo Ibáñez), Gabriel Bocksang (Pontificia U. Católica de Chile); Jaime Couso (U. Diego Portales), Miriam Henríquez (U. Alberto Hurtado), Emilio Oñate (U. Central), Juan Andrés Varas (U. Austral) y el decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Finis Terrae, Ignacio Covarrubias.

Por su parte, la delegación internacional estuvo compuesta por la secretaria general de la entidad, Simona Granata-Menghini; el expresidente de la institución, Gianni Buquicchio; el miembro de España, Josep María Castellà, el miembro de Estados Unidos, Paolo Carozza; y el coordinador del organismo, Serguei Kouznetsov.

La Comisión Europea para la Democracia por el Derecho, también conocida como Comisión de Venecia, es un órgano consultivo del Consejo de Europa creado en 1990 y formado por expertos independientes en el campo del derecho constitucional. Su misión es asesorar a los Estados miembros y ayudarlos a que adecuen su estructura legal a los estándares europeos, junto a la experiencia internacional respecto a la democracia, los derechos humanos y el Estado de Derecho.

Durante su visita al país, la Comisión de Venecia sostuvo además reuniones similares con el por entonces Presidente Piñera, la actual ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola, la mesa directiva de la Convención Constitucional, y las mesas de ambas Cámaras del Congreso, la Corte Suprema y el Tribunal Constitucional, además de organizaciones de la sociedad civil.

Las reuniones, llevaron a la Comisión de Venecia a elaborar una serie de recomendaciones para el actual proceso constitucional chileno, a través de un informe emitido el 18 de marzo recién pasado. En él, una de las observaciones más reiteradas por la Comisión fue la necesidad de que la Constitución sea fruto de amplios acuerdos nacionales.