Las egresadas de Dirección y Gestión de Artes Culinarias de la Universidad Finis Terrae, Rosario Molina y María José Llopis, fueron seleccionadas para representar a Chile en la Copa Mundial Junior de Pastelería 2026, que se realizará en Rimini, Italia, en el marco de la feria SIGEP, considerada una de las vitrinas gastronómicas más relevantes del mundo.
El logro llega tras ganar el Campeonato Nacional de Jóvenes Pasteleros, competencia que reunió a los mejores talentos emergentes del país. Ahora, las jóvenes deberán enfrentar a representantes de 18 países, mostrando el talento chileno y la formación de excelencia de la Universidad Finis Terrae – Le Cordon Bleu Chile.
Detalles de la competencia
La Copa Mundial Junior de Pastelería es la competencia más prestigiosa del mundo para jóvenes talentos del rubro. En ella, los equipos deben desarrollar complejas piezas artísticas y técnicas en chocolate, azúcar y pastelería contemporánea, combinando innovación, destreza y estética. Este certamen es una oportunidad para que los participantes puedan enfrentar desafíos complejos para poner a prueba diferentes técnicas culinarias, conectar con pasteleros de todo el mundo y dar sus primeros pasos en la pastelería profesional a nivel mundial.
“El tema de esta competencia es representar a un personaje de tu país que haya dejado una huella importante en la historia, y nosotros vamos a representar a Gabriela Mistral, toda nuestra temática tiene que ver con ella”, partió diciendo María José Llopis.
“Como requisito nos piden representar una escultura de chocolate de mínimo 1.20 metros con decoraciones de azúcar, otro de bollería, tarta vegana, postre chileno. Con todo eso se arma una propuesta entretenida que llame la atención de los jueces, tener un postre rico es el desde, a eso le debemos sumar que sea vea bien, que tenga show con historia y propuesta entretenida y dinámica”, agregó la concursante.
Finalmente, Llopis explicó el motivo de la elección de la poetisa chilena fue porque querían destacar su importancia a nivel internacional: “Gabriela Mistral es una mujer power, fue la primera mujer chilena en ganar un Premio Nobel y por lo mismo queremos relevar su figura”.

Rumbo a Italia
Rosario Molina explicó que el proceso para llegar a ser el dúo seleccionado para representar a Chile en este importante certamen internacional de pastelería viene desde hace meses: “para llegar primero a la final, fue un tremendo proceso de selección. Tuvimos tres competencias previas y en todas igual había buena competencia. Tuvimos que prepararnos harto todos los días y en la universidad nos prestaron el espacio. Fue una preparación muy dura pero a la vez fue una experiencia muy bonita”.
El desafío, dicen, es también logístico, debido a que deben realizar un traslado de alrededor de 15 maletas, con todos los implementos que deberán utilizar: “Solamente en Chile tuvimos que armar tres van para competir, que no es ni lo dimensionable de lo que tenemos que llevar a Italia, porque no sabemos con lo que contamos, qué ingredientes hay ni nada, por lo mismo, tenemos que llevar todo desde acá para que no nos falte nada. Nuestro coach nos comentó que debemos llevar 15 maletas con sobrecarga”.
Por su parte, María José Llopis destaca que “este proceso va a ser retribuido de alguna forma, es como una vitrina en el fondo, es un desafío personal, pero también al mismo tiempo es como por amor al arte. Además vamos a representar a Chile, que es un orgullo enorme. Queremos mostrar que desde Chile también se puede competir a nivel mundial, con profesionalismo, rigor y creatividad”.
Compromiso Formativo
Este hito reafirma el compromiso de la Universidad Finis Terrae con la formación integral de profesionales capaces de destacar en escenarios internacionales. Así lo destacó Carolina Cumsille, directora de la carrera de Dirección y gestión Artes Culinarias en la U. Finis Terrae: “Para nosotros es un orgullo ver cómo nuestras egresadas se transforman en embajadoras del talento chileno y de la excelencia formativa que promovemos.
La Universidad Finis Terrae y Le Cordon Bleu son espacios donde se cultiva la pasión, la disciplina y la creatividad que hoy las llevan al mundo”“Todo esto nació en la Finis Terrae, dentro de sus aulas y en las cocinas de Le Cordon Bleu. Aquí aprendimos a diseñar, fallar, volver a intentar, y entender que las manos crean solo después de que la mente domina la técnica. Este desafío es una forma de devolverle a la universidad todo lo que nos enseñó”, finalizó Rosario Molina.



