La OPS-OMS definió en 2018 como prioridad que la educación de los profesionales de la salud prepare a estudiantes y profesionales para desarrollar habilidades de trabajo en equipo. En respuesta a este llamado, en agosto del presente año se formó la Comisión de Educación Interprofesional de la Red Andina de las Facultades de Medicina, siendo el Dr. Mauricio Soto, Director de Investigación de la U. Finis Terrae nombrado como su Coordinador.

El Dr. Soto. quien también ocupa el cargo de Secretario Ejecutivo de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (ASOFAMECH), afirmó que “mi función es coordinar la comisión de Educación Interprofesional para diseñar actividades que concienticen a los docentes de las Facultades de Medicina de la Red Andina sobre la importancia del trabajo interdisciplinario e interprofesional.”

Las autoridades del sistema de salud y las facultades de medicina de Bolivia colaboran para establecer directrices y enfoques eficaces con el propósito de integrar temas de relevancia transversal en la educación médica, acordes con la política pública de salud en Bolivia.

En este sentido, los especialistas han coincidido en la importancia de definir componentes fundamentales para la formación de pregrado, tales como la Atención Primaria de la Salud (APS), la Educación Interpersonal, la Educación Interdisciplinaria y la investigación científica. Estos aspectos son considerados ejes transversales esenciales en la construcción y desarrollo del plan de estudios destinado a la formación integral de futuros profesionales médicos.

El Dr. Mauricio Soto también fue invitado a participar como ponente en la Reunión de Rediseño Curricular de las carreras de Medicina, que tuvo lugar el 24 de agosto y fue organizada por la Asociación Boliviana de Facultades de Medicina (ABOLFAM) en colaboración con la OPS. 

Durante su exposición, titulada “Implementación de la investigación en el currículo de Medicina,” el Dr. Soto destacó que la investigación se convierte en una herramienta de aprendizaje para que los y las médicos la utilicen en la formulación del problema, la búsqueda de información, la formulación de hipótesis diagnósticas, la contrastación y comprobación de las mismas, así como en la toma de decisiones.

El Dr. Soto concluyó, “También permite que el médico utilice la investigación en su práctica para seleccionar la mejor evidencia científica disponible, analizándola críticamente y tomando decisiones considerando su juicio clínico, el contexto y las preferencias del paciente.”