Participar en instancias de representación estudiantil, compromiso social y vida pastoral ha sido siempre un atractivo de la experiencia universitaria. En este aspecto, los alumnos de la Escuela de Psicología de la Universidad Finis Terrae no se quedan atrás, siendo parte de muchos de estos proyectos a lo largo de estos años, incluso durante la pandemia.

Participar en estas instancias es tan importante para la Universidad como para los propios alumnos, que sacan de ellas mucho provecho, tanto profesional como personal, por lo que en el mes de la Solidaridad, la Escuela quiere destacar sus experiencias.

Maycol Bravo es presidente de Acción Social U. Finis Terrae (Asufinis) y cuenta que “como estudiante de psicología y presidente de Asufinis me siento alineado con la acción social. Crecí en una población y un hogar ‘acogido’, lo que ayudó a darme cuenta de las injusticias sociales y las necesidades que se tienen. Sin embargo, mis padres y hermanos me enseñaron a servir a otros y que los cambios parten de uno mismo. Por eso quiero ser un agente de cambio e inspirar a otros y gracias a Asufinis y al estar en Psicología creo poder lograrlo. Entrar como voluntario y ahora ser presidente me ha formado como líder y me ha dado más confianza en la carrera, ayudándome a mejorar las habilidades sociales y a generar confianza como terapeuta para futuros pacientes”.

En esta misma instancia participa desde 2020 María José Miranda que relata que “mi experiencia participando en actividades extraprogramáticas empezó con un anuncio que promovía Asufinis, invitación perfecta para poder participar en acción social. Empecé como directiva desde el primer momento ya que sentía que mis habilidades ayudarían al equipo y el enfoque social es algo que va de la mano con la carrera. El compromiso social me ha acercado a conocer nuevas realidades y motivado mi espíritu de ayuda hacia el otro”.

Alejandra Ulloa, presidenta del Centro de Estudiantes de Psicología, expresa que “asumir el cargo ha tenido varios desafíos y por lo mismo es importante tener buenos compañeros de equipo para apoyarnos en todo momento. Mi principal motivación para participar siempre ha sido ayudar lo más posible y también aportar con mi granito de arena a las futuras generaciones a través de la participación y no sólo a través del estudio. También me ha permitido conocer distintas personas dentro y fuera de la universidad, así como ampliar la mirada al ser humano”.

En la misma línea, pero como presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad, Nicole General nos cuenta que, “desde el colegio he tenido habilidades de liderazgo y me ha interesado hacer algo por mejorar los círculos. La combinación de mi personalidad e intereses, pertenecer al programa de liderazgo Eleva y vivir la vida universitaria me ayudó a poder estar donde estoy actualmente. Esta responsabilidad ha significado trabajo duro y aprender a organizarme bien, ya que compaginar el último año teórico, la Federación de Estudiantes, el programa de liderazgo, trabajo y vida personal, ha sido bastante caótico. Sin embargo, ha permitido poder desenvolverme mejor en situaciones formales, hablar en público, crear habilidades para resolución de conflictos y trabajo en equipo, que son cosas que estoy segura que podré implementar en mi futura y muy próxima vida laboral”.

Por último, también alumnos que participaron en el pasado quisieron su experiencia. Manuela Pinzón, ya egresada, participó en el 2021 como representante del Centro de Estudiantes de la carrera y comenta que “me animé a participar porque junto al equipo tenía el  ideal de ser un puente entre la Escuela y los alumnos, que ayudara a unir y construir comunidad, sobre todo en tiempos de pandemia. El ser representante fue una oportunidad increíble que, además de permitirme trabajar con un equipo genial, me llenó de muchas fortalezas internas cómo autoconfianza, empatía y capacidad de resolución de conflictos, que me han ayudado a desenvolverme en mi trabajo profesional como docente y como psicóloga clínica. La experiencia de liderar no es fácil, pero vale absolutamente pena”.