Como una obra interesante y “que nos obliga a elevar los estándares del debate” calificó la fiscal Ximena Chong el libro Delito de Contrabando. Principales Aspectos y Revisión de Casos, del profesor de Derecho Procesal Penal de la U. Finis Terrae, Rodrigo Ríos. La obra -que publicó la editorial de la universidad- fue presentada por la Jefa de la Fiscalía de Alta Complejidad de la Fiscalía Regional Metropolitana Centro Norte, en una ceremonia que contó con la presencia de académicos, alumnos y egresados del plantel, así como familiares y amigos del autor, y público en general.

Ríos es abogado y Magíster en Derecho Público de la Universidad de Chile. Trabajó cerca de diez años en el Ministerio Público, como Fiscal Adjunto y Subdirector de la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones. Hoy dirige el Centro de Derecho Penal y Procesal Penal Comparado, Cesare Beccaria, y el Magíster en Derecho y Litigación Penal, ambos de la Universidad Finis Terrae, donde además es profesor de Derecho Procesal Penal y Litigación Oral.

El académico es además coautor -con Rodrigo González- del Manual de Derecho Aduanero y -con Pablo Ortíz- del libro Ganancias Ilícitas. Una revisión crítica a su tratamiento legal en Chile, texto que aborda la problemática de las ganancias que se generan por la comisión de actos tipificados como delito.

En la presentación de su última obra, el propio autor explicó que la principal dificultad con la se encontró al investigar el tema fue “la escasa fundamentación por parte de los tribunales al momento de condenar a personas como autores del delito de contrabando. Y esa constatación debiera ser alarmante, porque estamos teniendo sentencias definitivas sin mayor fundamentación, las cuales no se hacen cargo de responder por qué a una persona se la ha condenado como autora de este delito aduanero”.

“Lo anterior se agrava –explicó el profesor Ríos- si se considera además la relación concursal en la cual se ve envuelto generalemente el delito de contrabando, lo que trae aparejado una sanción a nivel penal no menor”. Por eso él plantea que el análisis debe ser serio y la invitación del libro es, entonces, “a abrir esa posibilidad para que todos los operadores del sistema asumamos esa responsabilidad, porque al final del día las decisiones que se están tomando dicen relación con la privacion de libertad de personas y ese no es un tema que pueda ser obviado”.

Según el también director del Magíster en Derecho y Litigación Penal, es importante elevar el estándar de las resoluciones cuando se sanciona por delito de contrabando, porque precisamente se trata de “uno de los pocos nichos” dentro de la Reforma Procesal Penal donde se evidencia una jurisprudencia tan pobre. “La gran pregunta que está en deuda en lo que va de la Reforma es ¿cómo la manera en que se ha resuelto este tipo de casos no afecta las garantías fundamentales y el debido proceso? Esa pregunta no se ha respondido de manera directa y ha sido esquivada por parte de nuestra jurisprudencia”, advirtió Ríos.

CHONG: EL LIBRO LLENA UN VACÍO

“La evasión tributaria -entendida en un sentido amplio- comprende también al delito de contrabando, ya que los tributos aduaneros son impuestos que gravan el comercio exterior”, explicó Ximena Chong, quien trabajó también en el Servicio de Impuestos Internos, primero como procuradora, y luego como Jefa del Departamento Jurídico.

En su ponencia de presentación del libro del profesor Ríos, Chong aclaró que uno de los perjuicios del delito de contrabando es que al entorpecer los procesos normales de comercialización, provoca pérdidas monetarias a los países, al dejar de percibirse ciertos impuestos, tanto aduaneros como los que se pagan internamente en el mercado formal, si esos mismos productos hubieran ingresado de forma legal. “Lo que hace es introducir distorsiones en el sistema económico, dando paso fundamentalmente a un sistema de mercado informal, pero introduce además inequidades entre los mismos competidores y sustrae flujos de dinero del sistema de ingresos y egresos del Estado”, expuso la abogada.

La Jefa de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte sostuvo que los delitos aduaneros son una de las materias más antiguas dentro del Derecho Penal Económico, más incluso que “los delitos de la Ley del Mercado de Valores, los delitos de la Ley de Bancos o los delitos tributarios, que son de una data muy ulterior a los aduaneros, particularmente al delito de contrabando”. Pero a pesar de la antigüedad de la existencia del ilícito, todavía en el país “hay una dogmática bastante escasa que analiza este tipo de conductas delictivas y es ahí donde está el primer gran aporte del libro tanto a la dogmática como en la apertura de la discusión de este tipo de delitos: viene a llenar un vacío de la dogmática de una manera realista y razonable”, comentó la fiscal.

Por su “claridad conceptual”, Ximena Chong cree que el  libro de Rodrigo Ríos debiera transformarse en una suerte de manual que sea relevante en la práctica diaria de quienes imparten justicia, porque se trata de una “herramienta interesante para validar ciertas argumentaciones ante los tribunales de justicia cuando se disputan temas de contrabando, al clarificar un ámbito que a veces parece tan imbricado, y que ni los operadores, ni los jueces queremos acercarnos con mucha facilidad”.

“En síntesis, se trata de una obra interesante, que constituye un aporte para quienes se desempeñan en el Derecho Penal Económico y que abre espacios en una dogmática sobre un tema que es cada vez más actual y necesario. Y a quienes lo leemos, nos obliga a elevar los estándares del debate y esperamos también elevar los estándares de las resoluciones”, destacó la fiscal Chong.

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