El gerente general de la empresa Red Megacentro, Claudio Chamorro, fue el protagonista de la cátedra “Empresa y Sociedad”, que se llevó a cabo durante la jornada del martes 9 de mayo en dependencias de la Universidad Finis Terrae.En la actividad, dirigida a alumnos de la carrera de Ingeniería Comercial como parte de la asignatura “Contexto Organizacional y Casos de Negocios”, el ejecutivo compartió su experiencia laboral haciendo un repaso por las empresas en las que ha estado vinculado, con especial énfasis en Red Megacentro, dedicada a la gestión inmobiliaria que entrega soluciones de infraestructura a través del arriendo de bodegas, oficinas y grandes centros de distribución. Cuenta con 46 puntos en operación a lo largo de Chile, Perú y Estados Unidos.“Lo que ha hecho Red Megacentro, básicamente, es construir bodegas. Imagínense un conjunto de condominios, pero de bodegas. Hoy uno de nuestros ‘clientes estrella’ es Mercado Libre. Es probablemente el centro de distribución más grande de Chile. Piensen en un edificio que no tiene divisiones, que no posee muros y que tiene 100 mil metros cuadrados de extensión, lo que equivale a 40 canchas de fútbol, para que se hagan una idea”, explicó el economista formado en la Pontificia Universidad Católica, quien también tuvo palabras para referirse a sus orígenes. “Yo soy de la comuna de Cerro Navia. Desde temprana edad tuve un gran gusto por los números. Y esa pasión me llevó a formarme y a seguir una carrera profesional. Me gusta despertar cada mañana sabiendo que hay un desafío por delante”.
El ejecutivo señaló que uno de los principales aciertos de Red Megacentro fue el hecho de cambiar el paradigma de lo que antes significaba una bodega de almacenamiento. “Muchas empresas empezaron a ver que las bodegas, que antes eran un lugar aburrido, se transformaron en un entorno donde había carros y maquinaria automatizada que se encargaba de subir cargamento a vehículos para ir a entregárselo a sus clientes. Esto generó que las bodegas pasaran de ser una unidad de administración o de costo, a ser una unidad de venta”, señaló.
El economista valoró el hecho de que existan este tipo de instancias en el mundo académico en que estudiantes puedan interactuar con gerentes de empresa para conocer parte importante de su experiencia. “Mientras más pronto uno pueda tener información de cómo funciona el mundo real, mucho mejor. Aquí en Chile uno entra a estudiar muy joven. Creo que se debe acercar mucho más la educación a las empresas. Cuando yo empecé no tenía idea de cómo sería mi primer día de trabajo. Las empresas se acercan a las universidades cuando necesitan contratar gente, pero debería haber más programas en que las empresas inviten a los jóvenes a tener una participación mayor, desde temprano. Que al primer año de carrera trabajen un período de verano; al segundo año otro período. En Estados Unidos, por ejemplo, el mundo del trabajo no está tan desconectado de la vida de los jóvenes”, enfatizó el profesional.