Investigadora de la Universidad Finis Terrae lidera innovador estudio sobre el cáncer de colon
La Dra. Glauben Landskron explora el papel de la proteína FTO en el desarrollo de esta enfermedad, buscando abrir camino hacia nuevas terapias que combinen inmunoterapia y medicina personalizada.
Según datos del Global Cancer Observatory, el cáncer de colon es la tercera causa de muerte oncológica en Chile, afectando principalmente a personas mayores de 50 años. Sin embargo, los últimos años han evidenciado un preocupante aumento de casos en pacientes más jóvenes, lo que plantea nuevos desafíos para el sistema de salud.
Esta tendencia no solo resalta la necesidad de estrategias preventivas, sino también de investigaciones que aborden los factores subyacentes en la progresión de esta enfermedad. En este contexto, la Dra. Glauben Landskron, académica investigadora del Centro de Investigación en Biomedicina (CIBMED) de la Universidad Finis Terrae, lidera un innovador estudio sobre el papel de la proteína FTO (Fat Mass and Obesity, por sus siglas en inglés) en el desarrollo del cáncer de colon.
Obesidad y cáncer
La obesidad, reconocida como un factor de riesgo para diversos tipos de cáncer, es uno de los puntos de partida de este estudio. Chile ocupa el segundo lugar en índices de obesidad en América Latina y lidera en obesidad infantil, lo que plantea un desafío para las próximas generaciones.
La doctora Landskron advierte que esta tendencia podría acelerar la aparición de neoplasias en edades tempranas, subrayando la urgencia de comprender los mecanismos detrás de esta relación.
“Hay varios tipos de cáncer asociados al metabolismo, y justamente en ese contexto decidimos enfocarnos en la relación entre obesidad y cáncer, buscando un marcador común. Fue así como encontramos esta proteína, que previamente se ha asociado a sujetos con mayor índice de masa corporal y mayor depósito de grasa. Queríamos evaluar si esta proteína, en etapas tempranas del tumor, podría favorecer su aparición y progresión”, advierte la investigadora.
Una proteína bajo la lupa
La investigación se centra en comprender cómo la FTO, directamente asociada con la obesidad, influye en el microambiente tumoral y en las respuestas inmunológicas del cuerpo. Según Landskron, esta proteína muestra niveles elevados en tejidos tumorales en etapas tempranas del cáncer de colon y está relacionada con un debilitamiento de la función de los linfocitos citotóxicos, esenciales en la defensa antitumoral.
“Cuando inhibimos esta proteína, ciertos marcadores de agotamiento disminuyen. Esto podría permitir una terapia coadyuvante apoyada por la inmunoterapia”, explicó.
Para comprobar esto, la investigadora de la Escuela de Medicina está realizando actualmente pruebas in vitro con células mononucleares de sangre periférica, lo que permite simular el ambiente tumoral y observar, de manera directa, la respuesta de los inhibidores de FTO.
“Lo que buscamos es ver si se recuperan las capacidades antitumorales de los linfocitos. Las implicancias de este estudio podrían ser muy relevantes, ya que podría revitalizar la respuesta inmune en los pacientes; es decir, aquellos pacientes que se someten a una cirugía para extirpar el tumor podrían recibir una terapia que potencie su respuesta inmune, ayudando a evitar la recurrencia”, señala la Dra. Landskron
Proyecciones
Aunque el estudio aún se encuentra en etapas preliminares, la investigadora de la Universidad Finis Terrae tiene claro el siguiente paso: llevar el modelo in vitro a pruebas en seres vivos.
“Propusimos un ensayo utilizando modelos de ratones con tumores. La idea es inducir el desarrollo de un tumor en estos modelos y tratarlos con un inhibidor de FTO. El objetivo es evaluar cómo responde el microambiente tumoral en presencia de este inhibidor, observando si las poblaciones celulares cambian o si su estado funcional mejora, promoviendo una respuesta inmune más efectiva. Eso es lo que buscamos analizar”, señala Landskron.
Si los ensayos en seres vivos son favorables y se demuestra que las moléculas inhibidoras de esta proteína realmente benefician a los pacientes, la doctora señala que sería posible avanzar hacia estudios clínicos en fase 1. Sin embargo, mantiene la cautela respecto a sus proyecciones, enfatizando que “es muy temprano para afirmar su éxito, especialmente porque esta proteína está presente en todas las células y aún se desconocen muchas de sus funciones. Por ello, resulta prematuro proyectar una intervención a nivel sistémico”.
A pesar de que los resultados son iniciales, Landskron destacó el potencial prometedor de su investigación. “Definitivamente podría aportar al portafolio de terapias disponibles. En nuestro país no contamos con tantas opciones, pero con la Ley de Cáncer, la Ley Ricarte Soto y los consejos de apoyo a la investigación en cáncer, se podría mejorar el acceso a distintos medicamentos y fomentar una medicina más personalizada”, concluye.
Con proyectos como este, la Dra. Glauben Landskron y todos los investigadores que componen el CIBMED reafirman su compromiso con la generación de conocimiento científico de alto impacto. Su trabajo no solo busca ampliar las fronteras de la investigación oncológica, sino también aportar soluciones concretas que mejoren la calidad de vida de los pacientes.