Mario Toral: “Jamás hay que interrumpir un sueño”
El escritor Eduardo Guerrero, autor del libro “Un soñador profesional. Conversaciones con Mario Toral”; presentó su obra junto al poeta Pedro Lastra y el historiador Álvaro Góngora, quienes abordaron algunos episodios y anécdotas de la vida del artista.
Sus viajes por Latinoamérica, su amistad con Pablo Neruda, su permanencia en Nueva York, su narrativa y crítica social y su construcción como artista son parte de los episodios de la vida de Mario Toral, pintor, muralista y fotógrafo, que aborda el libro “Un soñador profesional. Conversaciones con Mario Toral”, escrito por Eduardo Guerrero.
Rodeado de artistas, escritores, autoridades académicas, amigos y familiares, ayer se realizó la presentación del libro en la Universidad Finis Terrae, la casa de estudios que lo trajo de regreso a Chile para fundar su Facultad de Artes, a inicio de los ´90.
El escritor Eduardo Guerrero, el poeta Pedro Lastra y el decano de la Facultad de Humanidades y Comunicaciones de la U. Finis Terrae, Álvaro Góngora, junto al propio Toral comentaron la obra, que es un recorrido desde su niñez hasta la madurez del pintor, muralista, grabador y fotógrafo.
Autodenominado “soñador profesional”, Toral realizó una presentación que tuvo como hilo conductor esta ocupación. “Cuando uno sueña no hace nada malo”, dijo. Al finalizar su intervención compartió una lección fundamental que aprendió hace muchos años en una interacción que tuvo con una persona en la calle: “jamás hay que interrumpir un sueño”.
“El libro con Mario cruza toda su vida, desde su infancia hasta el día de hoy, donde uno se va dando cuenta de las vicisitudes de la vida humana y también de un país y un continente. La invitación a leer este libro parte por esas motivaciones, por conocer más a un pintor de renombre en su día a día, por conocer aún más pensamientos de personas que están creando, ya sean literatos, cineastas o poetas (…) es acercar al pintor al público común y corriente y no solo a especialistas en arte”, subrayó el escritor Eduardo Guerrero.
“Leyendo el libro uno se puede dar cuenta quién es Mario”, dijo el decano Álvaro Góngora. “La suya es una vida muy especial. Creo que él, si bien empezó muy autodidacta, llegó a ser un gran pintor y figura a nivel nacional en términos artísticos. Entonces, a través de esa vida, que está en el libro, uno puede descubrir cómo se puede llegar a ser un gran pintor sin haber comenzado estudiando, sino de forma autodidacta, haciendo figuras para Navidad en las tarjetas, y llegar a ser un muralista de talla mundial”, afirmó Góngora.
El decano Mario Toral
A fines de 1993, mientras vivía en Nueva York, Mario Toral recibió dos invitaciones casi simultáneas en Chile: venir a hacer el mural del Metro Universidad de Chile y fundar la Facultad de Arte de la Universidad Finis Terrae.
Respecto al mural “Memoria visual de una nación”, el artista ayer dijo que “es algo que llena mis deseos: que el arte salga un poco de la galería de arte, ya que es un público muy limitado”.
Toral fue decano de la Facultad de Artes de la U. Finis Terrae entre 1993 y 2001. En ese período, congregó a reconocidos pintores chilenos con gran trayectoria y repertorio de obras. En 2008, en esa casa de estudios se inauguró un mural del artista.
“Mario es un personaje significativo no sólo para la U. Finis Terrae, sino también para Chile, donde ha tenido una significación por el tipo de obras y vínculos que ha desarrollado. Por lo tanto, es alguien que merece estos espacios, merece el reconocimiento (…) es un artista activo que está aún en producción. Es una satisfacción haberlo acompañado y haber participado en esta presentación”, expresó Enrique Zamudio, decano de la Facultad de Artes de la U. Finis Terrae el hecho que los propios artistas cuenten su historia lo encuentra destacable.
El libro “Un soñador profesional. Conversaciones con Mario Toral” se puede encontrar en librerías de circulación nacional tales como: Antártica, Feria Chilena del libro, Qué Leo Providencia, Universitaria, GAM, entre otras. Además, está disponible para venta directa en Ediciones Finis Terrae, ubicada en Av. Pedro de Valdivia 1646, Providencia.