“Mecánicas de erosión”, el proyecto artístico de José Ulloa que revela el impacto del arte en los ecosistemas
Esta obra dialoga con las “cicatrices del territorio” y el legado de las esculturas de piedra travertina del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA).
Por Equipo Vicerrectoría de Investigación, Creación Artística y Doctorado
En las antiguas canteras de mármol de delle Acque Albule, ubicadas a 30 kilómetros al este de Roma, el artista visual y académico de la Facultad de Artes de la Universidad Finis Terrae, José Ulloa Acosta, inició en julio pasado, el estudio de campo de su proyecto “Mecánicas de erosión”, con el que obtuvo el apoyo del Fondo de Creación Artística Especializada 2024 de la Vicerrectoría de Investigación, Creación Artística y Doctorado.
En esta región montañosa de Italia, famosa por la extracción de travertino utilizado en esculturas y monumentos de la Antigua Roma, José Ulloa desarrolla su proyecto a partir de una “experimentación explorativa” empleando tecnologías de la representación. Su objetivo es generar conexiones entre la colección escultórica en piedra del Museo Nacional de Bellas Artes y la zona de explotación de mármol romano, para profundizar en las consecuencias ecológicas de esta práctica y su uso en el arte.
“Me hablaron de unas canteras de piedra travertina muy antiguas que están en plena actividad. Con esa información, empecé a buscar vínculos con el mundo del arte en Chile, ¿de dónde vienen los materiales de la colección de esculturas del MNBA? Esa fue una de las primeras preguntas”, recuerda José Ulloa, quien cuenta en Italia con la colaboración logística e interdisciplinaria del Centro de Investigación de Arte y Naturaleza L’Aquila Reale, de Licenza.
Nuevas narrativas del patrimonio escultórico
Al investigar en la colección del MNBA, junto al curador Claudio Guerrero Urquiza, descubren que muchas de las esculturas del catálogo del Museo, corresponden a artistas chilenos, cuya elaboración fue realizada en los principales centros culturales de Europa a fines del siglo XIX.
El proyecto propone “nuevas narrativas” y una revisión de las materialidades del patrimonio escultórico nacional, enfocándose especialmente en la colección conocida como el “Museo de copias”; institución inaugurada en 1911 que cumplió una doble función pedagógica: por un lado, sirvió para la enseñanza artística a los estudiantes de la academia y, por otro, promovió la difusión del “buen gusto” en la sociedad chilena.
Para el artista, el acervo del MNBA es fundamental en la representación de la figura humana, reflejando un paradigma artístico basado en el humanismo y el racionalismo clásico. En este contexto, explica, “la copia, el calco y la repetición se emplearon como herramientas pedagógicas dentro de los cánones estéticos de las academias del siglo XVIII y XIX”.
Intervención tecnológica sobre la piedra
Los objetivos del proyecto incluyen la reproducción, a través de procedimientos y herramientas digitales, de parte de las obras en piedra travertina del MNBA, así como el levantamiento digital en trabajos de campo en la cantera de mármol en Italia. Además, el artista experimentará con materialidades de prototipado e impresión 3D, “buscando re-dimensionar la figura humana a partir de la copia y la reproducción tecnológica”, explica.
Entre las obras seleccionadas por el artista se encuentra “El pórtico (1978)” de la escultora Aura Castro (1946), una pieza modernista realizada en travertino romano. Asimismo, se incluirá la escultura “Galvarino (1873)” de José Miguel Blanco (1839-1897), cuya copia digital intervendrá en las canteras italianas.
“Me concentraré en el error tecnológico para articular poéticas que aborden las problemáticas de la erosión, las condiciones hídricas del lugar y elementos no humanos, como algas o plantas”, concluye el artista, quien estará en Italia hasta diciembre de este año, desarrollando su investigación artística.
“Mecánicas de Erosión” cuenta también con financiamiento del Fondart Nacional, en la línea de artes visuales, y finalizará con una exhibición en el Palazzo Baronale Orsini de Licenza en noviembre de 2024, y con una muestra individual en el Museo Nacional de Bellas Artes en abril de 2025.