El profesor del Magíster en Derecho de los Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Universidad Finis Terrae, Emanuel Ibarra Soto, fue invitado por la Comisión de Recursos Hídricos, Desertificación y Sequía del Senado a exponer su opinión respecto del proyecto de reforma del Código de Aguas que se encuentra en segundo trámite constitucional.

En su exposición, el académico destacó la importancia de agregar herramientas modernas de fiscalización y sanción a la gestión de la Dirección General de Aguas (DGA), tales como los mecanismos de corrección temprana, el procedimiento sancionatorio simplificado y la notificación electrónica, todos elementos que constituyen el objeto de la referida reforma, proyecto de ley que busca modificar el Código de Aguas en lo relativo al procedimiento de fiscalización y vigilancia por parte de la DGA.

“Este es un buen proyecto de ley que moderniza los procedimientos de la DGA”, señaló el profesor Ibarra durante su exposición, enfatizando que tal como ha planteado la DGA, “aquí van a repartirse esfuerzos y que por eso quizá no va a ser tanto el recurso financiero que se requiere, pero se va a requerir”.

Asimismo, durante la misma jornada el académico visitó la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputadas y Diputados para entregar su opinión sobre el proyecto de reforma de la Superintendencia del Medio Ambiente, institución en la que el profesor Ibarra se desempeñó como fiscal por más de una década. 

“Mi opinión en general es que este es un proyecto correcto y necesario. La superintendencia requiere esta reforma, requiere ser fortalecida. Y como todo proyecto, tiene fortalezas y cosas a mejorar”, señaló. El jurisconsulto destacó como fortalezas del proyecto la creación del procedimiento simplificado para infracciones leves, la inclusión de vías alternativas al procedimiento sancionatorio, la notificación de formulación de cargos por medios electrónicos y el proyecto de enviar a los Juzgados de Policía Local los casos menores de ruidos molestos. 

En el ámbito de las debilidades, señaló que “esta reforma, sin financiamiento real y concreto que llegue a la superintendencia, no sirve de nada (…) Y creo que si estamos modernizando el servicio, parte de la modernización es que el jefe o la jefa del servicio sea independiente. Creo que el sistema de nombramiento y remoción debiese parecerse al del Fiscal Nacional Económico y no depender del Presidente de la República como un funcionario de su exclusiva confianza”.