La solidaridad se transformó en un impulso decisivo para 16 estudiantes de la Escuela de Medicina de la Universidad Finis Terrae, quienes fueron reconocidos con becas de sostenimiento que premian su esfuerzo, talento y compromiso con la carrera. La ceremonia, realizada el 12 de agosto, buscó no solo aliviar las cargas económicas que conlleva la formación médica, sino también consolidar una comunidad universitaria que pone en el centro la excelencia y la vocación de servicio.
El apoyo fue posible gracias al aporte de distintas personas e instituciones, entre ellas Jaime Munita Valdivieso y Matías Balmaceda Mahns, la Fundación Kete, Patricio Bustamante Pérez y Regina Court, y Gonzalo Martino junto a su familia.
La contribución más significativa provino de Laboratorios Saval, que por segundo año consecutivo financió 10 de las 16 becas entregadas. El presidente de la compañía, Alejandro Saval, encabezó la entrega y expresó: “Es parte de nuestra labor asegurar que los profesionales tengan la oportunidad de desarrollarse y aportar al bienestar del país”, destacando además que los estudiantes “son realmente mateos y con mucha responsabilidad”.
Excelencia profesional, académica y humana
“La excelencia humana, que es lo más difícil de alcanzar, implica tratar a las personas con dignidad y compasión, algo que no se mide en los rankings, pero que resulta esencial para el ejercicio médico”, afirmó el Dr. Ernesto Vega, decano de la Facultad de Medicina, quien llamó a valorar la excelencia en todas sus dimensiones. En su intervención enfatizó que, frente a un sistema que suele fomentar la competencia, la facultad busca promover un ambiente de cooperación y solidaridad, con el propósito de formar médicos íntegros.
El rector Juan Eduardo Vargas, en tanto, subrayó la coincidencia de este acto con la Semana de la Solidaridad, destacando que este es una gran ayuda para los estudiantes. “Esto constituye un beneficio para nuestros estudiantes, pero también un compromiso para la universidad de entregarles la mejor formación, de manera de no defraudar a quienes hacen posible estas becas”, señaló, recordando que la carrera de Medicina se encuentra acreditada por seis años en el nivel de excelencia.
Por su parte, Gonzalo Martino, vicepresidente del Consejo Superior de la Universidad, sostuvo que esta ayuda es clave para dar tranquilidad a los estudiantes. “Es muy satisfactorio poder ayudar, porque se entrega un alivio que permite enfocarse en lo verdaderamente importante: su desarrollo profesional y humano”, indicó.
Los estudiantes distinguidos en esta ocasión fueron: Nicole Sazo Maldonado, Tania Torres Villablanca, Isidora Cabello Torres, Sofía Quiróz Rojas, Sofía Oyanedel Pavez, Lucas Palacios Farías, Catalina Ramírez Larraín, Francisca Ríos Castro, María Ignacia Santoni del Villar, Tomás José Carvajal Ramírez, María Trinidad Benavente Rivas, Emily Olivares Peña, Vicente Tolosa Jiménez, Javiera Aguilera Valdivia, Belén Miranda Silva y Renato Espinoza Rivas.
De esta manera, la entrega de estas becas no solo reafirma la importancia de apoyar a las nuevas generaciones, sino que también consolida una visión educativa que entiende la medicina como una profesión al servicio de la vida, el respeto y la dignidad humana.











