“Es la razón de existir de esta Universidad: Sin el desarrollo de la formación integral, sería una universidad, pero no la Finis Terrae”. Así expone José Mateos, vicerrector de Formación Integral, la importancia que tiene este concepto en el desarrollo de su labor. 

“Está enunciado en la misma misión de esta universidad, donde desde su primer renglón habla de la formación integral. En el Modelo Formativo está presente la formación integral”, expresa.  

El vicerrector José Mateos subraya que “la razón de ser de la Universidad no es solamente que las personas puedan aprender para tener un trabajo. Es formar a personas que respondan a una misión en la vida y, si realmente queremos lograr eso, debemos generar una transformación en cada uno de los estudiantes”. 

La autoridad plantea que en el modelo formativo de la Universidad Finis Terrae se busca que el currículo esté permeado por una visión integral de la persona, por lo que los ramos de las distintas carreras y de la Dirección de Formación General y Filosofía abordan las distintas disciplinas desde esta visión. 

Por otro lado, para lograr una formación integral, el modelo se apoya en la experiencia universitaria, que es el ámbito en que interactúan el estudiante, el académico y el entorno estudiantil. Esa experiencia también está permeada por la cultura de acompañamiento, sostiene el vicerrector José Mateos. 

“Sabemos que para que el estudiante pueda realmente lograr una formación integral, debe desarrollarse este trabajo en conjunto entre lo que se hace a través del currículo y la experiencia que vive en la universidad”, comenta, agregando que “por eso tiene que ver con el tipo de relación con los profesores, con lo que se vive en los patios, en los pasillos, con las experiencias de Compromiso Social, de Pastoral, de Vida Universitaria, del Deporte, etcétera. Todo eso es parte de la formación”.

La autoridad comenta que “independientemente de los indicadores y del posicionamiento de la Universidad, lo que hay detrás de todo son personas. Tenemos una misión con personas y cuando uno ve la gran necesidad de devolver al ser humano esta visión integral, de que encuentre un propósito en su vida, todo lo que hagamos valdrá la pena”.

La labor de la Vicerrectoría y mirada sobre el proceso de Acreditación

El vicerrector de Formación Integral explica que la unidad que encabeza “busca generar el diálogo con otras vicerrectorías. La formación integral no son solo actividades, sino que tiene que estar inserta en todos los procesos de la Universidad, ya que para esta  vicerrectoría, un objetivo principal es generar cultura de formación integral. La formación integral no se limita a lo que hagan las áreas de nuestra Vicerrectoría”.

Además postula que una de las labores constantes de la vicerrectoría es lograr desarrollar un trabajo coordinado y en equipo, entre las siete áreas que  la componen y que presentan como característica unitaria la atención y formación directa no solamente a los estudiantes, sino incluso hoy también a los graduados y titulados, a través de la Dirección de Alumni.

Al momento de ser consultado sobre las características y desafíos del trabajo que llevan adelante las direcciones que integran la Vicerrectoría de Formación Integral, la autoridad habla de que se está buscando formar cultura e impulsar procesos formativos con los estudiantes y ejemplifica con la labor de Compromiso Social, que excede a la realización de voluntariados, ya que lo que busca es generar una cultura de responsabilidad social desde la propia profesión y, por ello, cuenta con proyectos relacionados a varias carreras e incluso áreas, haciendo vinculación con municipalidades, organizaciones e instituciones, generado convenios, etc. así como el trabajo que se hace desde la Dirección de Vida Universitaria para formar en liderazgo a través de los distintos programas estudiantiles. 

Por último, al momento de referirse al proceso de Acreditación Institucional que lleva adelante la Universidad Finis Terrae, el vicerrector de Formación Integral reconoce sentirse tranquilo porque “estamos bien parados en aspectos que son evaluados de manera obligatoria y, además, nuestro modelo de Formación Integral va más allá de lo que podría exigirse a una universidad. Considerando el informe de autoevaluación y todo el trabajo que hemos hecho hay un evidente progreso en comparación con la última acreditación de 2019”.